I L U S I Ó N .

Ilusión. Siete letras. Siete letras capaces de hacernos soñar. De hacernos explorar los mundos imaginarios de los anuncios. Siete letras capaces de expresar por escrito, los sentimientos de alegría que tenemos en algún momento. Ilusión, puedes tenerla o no. Puedes creer en ella o no. Puedes perderla o no. Lo que si es seguro, es que la quieres. Es que la deseas. Porque por muy mal que estés, es ella la que va a conseguir sacarte tu mejor sonrisa. Esa sonrisa tonta que se te pone en la cara, que te avergüenzas de tenerla, pero que por nada del mundo quieres que desaparezca. Ilusión. Esas siete letras capaces de hacerte levantar, por muy dolorosa que haya sido la caída. Pero por muy bonita que sea, no te olvides de que hay que despertar. Que esta bien vivir de ella un tiempo. Que esta bien ser feliz a su costa. Pero no siempre. Porque al final se volverá en tu contra, y sera peor. La ilusión esta bien, pero la realidad puede llegar a ser aun mejor. Pero solo tú puedes hacer que sea así. Solo tu puedes hacer, que no quieras volver a soñar, porque no haya nada mejor que estar despierta.

Una vez, me dijeron que la ilusión es lo más bonito. A lo que contesté, que no, que las ilusiones ilusiones son y que no valen la pena. Que es mejor vivir. Ahora, ahora me arrepiento de eso. Porque si, porque vale, porque es mejor vivir, porque los sueños no te dan de comer, pero la ilusión te da ese brillo en los ojos, ese brillo que hace que seas afortunada, por todo y por nada. Por soñar y creer en todo, aunque no tengas nada. Una buena amiga me lo dijo hace tiempo, pero no supe comprender lo que era la ilusión, hasta que necesité vivir de ella.